Sus audífonos permanecen en sus oídos todo el día: un lugar oscuro y húmedo, y un caldo de cultivo perfecto para hongos y bacterias. Algunas de las bacterias que pueden crecer en un audífono pueden causar irritación en el revestimiento del canal auditivo. Esta irritación puede provocar enrojecimiento, picazón, hinchazón, dolor y un olor desagradable.
Utilice las herramientas de limpieza adecuadas
Limpiando tu audífonos con un paño no es suficiente para eliminar todos los gérmenes y bacterias. Las almohadillas con alcohol arruinarán la superficie de sus audífonos, por lo que es mejor usar toallitas desinfectantes sin alcohol o rociarlas con un paño limpio. Pídale a su audiólogo que le recomiende su marca preferida.
Cómo desinfectar sus audífonos
Para limpiar adecuadamente tus audífonos, sigue estos sencillos pasos todas las noches:
- Lávese y séquese bien las manos antes de quitarse los audífonos.
- Limpie sus audífonos con un pañuelo limpio y seco.
- Desinfecta las superficies de tus audífonos con una toallita desinfectante sin alcohol.
Mantenga sus audífonos seguros
Cuando te saques los audífonos, límpialos, desinféctalos siempre y guárdalos en su estuche. Nunca los guardes en tu bolso o bolsillo, ni los dejes sobre la encimera. No sólo se volverán a ensuciar, sino que podrían dañarse o romperse fácilmente, o caer en las manos de un niño pequeño o en la boca de una mascota.
Consejos adicionales de uso y cuidado
Desinfectar tus audífonos es sólo una parte del cuidado que necesitan. Usa estos Consejos para el mantenimiento de audífonos para una estrategia de uso y cuidado más completa.
Pasando un poco de tiempo Cuidando tus audífonos cada día los mantendrá trabajando lo mejor posible durante los próximos años y ayudará a prevenir infecciones e irritaciones. Hable con su audiólogo sobre la mejor manera de cuidar su tipo específico de audífonos y disfrute de una vida de audición saludable.